Humberto Perozo, quien lleva con honor su naturaleza animal tan intensa y a la vez apacible, una de una bestia y una rosa...
Es un niño que corre entre los bosques andinos, escondiéndose en la bruma y encontrándose con el espíritu de la Tierra, con el Oso Frontino que habita la cordillera y le cuenta secretos invaluables.
Continuando con la idea de que todo lo que existe sobre la faz de la Tierra está hecho de polvo de estrellas, presentamos nuevas obras de indumentaria, casuales y a la vez llenas de arte que puede se hace utilitario.
La naturaleza se compone de partículas siderales y eso es lo que queremos reflejar.